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28 Abr 2024

Autor:
Mongabay

Perú: 362 comunidades indígenas amazónicas dependen de Petroperú para suministro energía eléctrica

Wikimedia Commons

“Territorios contaminados y una transición energética que no avanza en la Amazonía de Perú” - 28 de abril de 2024

…En la comunidad indígena de Chosica no hay electricidad. Los indígenas wampis no tienen cómo preservar sus alimentos en una zona con temperaturas de 40 grados, no pueden usar electrodomésticos o simplemente iluminar sus casas por la noche. Si en alguna vivienda se ve un foco encendido, significa que detrás hay una familia que ha tenido que viajar cuatro horas hasta la ciudad más cercana para comprar un panel solar o un generador eléctrico a base de combustible. Si este eventualmente se descompone, tienen que reunir nuevamente dinero para comprar las piezas averiadas y reparar el equipo. Esta es la situación de solo una de las 362 comunidades indígenas de la región de Amazonas en Perú, dice el dirigente indígena Wrays Pérez.

Esta dependencia al petróleo y la brecha de conexión eléctrica se vive de la misma manera en las comunidades quechua de la región amazónica de Loreto. Un total de 46 territorios de las nacionalidades achuar, kukama, quechua y shuar viven en la zona de influencia del Lote 192 y 8, y dependen totalmente de las empresas que explotan hidrocarburos para tener energía. Petroperú proporciona a las comunidades en la zona de Andoas electricidad de ocho de la mañana a once de la noche, tiempo en que deben aprovechar para congelar sus alimentos, preservar medicamentos o tener acceso al internet en la cabina comunitaria. No saben hasta hoy lo que es tener energía las 24 horas del día, cuenta el apu Aurelio Chino de la Federación Indígena Quechua del Pastaza (FEDIQUEP). Las horas de luz que tienen las consideran una victoria tras varios años de pedidos, exigencias y acuerdos con las empresas operadoras…

“El Estado nunca se ha preocupado por llevar energía a las comunidades. La última vez que nos prometieron mejorar la situación fue en el 2021, cuando firmamos el Acuerdo de Consulta Previa y estaba el Ministerio de Energía y Minas”, dice Aurelio Chino. Lo mismo señala Wrays Pérez, líder de la alianza de Organizaciones indígenas de Perú-Ecuador de Cuencas Sagradas. “No hay una intención legítima del Estado de querer apoyar con energía solar para mejorar la calidad de vida de la población en la zona, o sea, nada, abandono total”, precisa.

A esta desatención estatal y a la falta de servicios, se suma que las comunidades de las dos regiones conviven con operaciones petroleras dentro de sus territorios. Por Amazonas pasa el Oleoducto Nor peruano y se encuentra el Lote 64, que no ha logrado licencia social para su explotación. Las comunidades de Loreto lidian con los lotes 192 y 8, el primero en manos de Petroperú y su socio estratégico Altamesa Energy Canadá, y el segundo aún en proceso de licitación para volver a operar.