Las comunidades indígenas rarámuri y ódame como Mogótavo, Huitosachi, Cordón de las Cruces, Bosques de San Elías Repechique, Bacajipare, Malanoche y Bawinokachi han protestado por el reconocimiento de sus pueblos y respeto a sus territorios ancestrales por parte del Estado. Ejemplos de casos en donde se han violado los derechos humanos de las comunidades son el caso de la comunidad Mogótavo y la comunidad de Bosques de San Elías Repechique.

La comunidad rarámuri de Mogótavo del municipio de Urique es víctima de acoso judicial por parte de empresarios políticos, quienes han interpuesto una demanda penal hacia la comunidad por "despojo agravado", esto porque reclaman la pertenencia de 154 hectáreas de territorio que supuestamente les fueron vendidas por Odile Sandoval, dueña del hotel Divisadero Barrancas.

Por otro lado, La comunidad de Bosques de San Elías Repechique ha llevado una lucha de más de 100 años en defensa de su territorio. Muchos proyectos empresariales como el Aeropuerto Internacional Barrancas del Cobre y el Gasoducto El Encino–Topolobampo, a cargo de la empresa Trans-Canada y su filial en México, Transportadora de Gas Natural se han llevado a cabo sin la consulta de la comunidad indígena. El 2 de febrero de 2024, el Juzgado Federal Décimo de Distrito en Chihuahua reconoció la conexión de la comunidad indígena Bosques de San Elías Repechike con la tierra y su posesión tradicional de tierras y recursos, se reconocieron 11 mil hectáreas, a pesar que su territorio comprende 33 mil hectáreas.