Los días 14 y 15 de diciembre de 2019, el gobierno mexicano realizó dos consultas, una indígena y una ciudadana, en los cinco estados pertenecientes a la península de Yucatán en relación a la construcción de una vía conocida como “Tren Maya”. Mientras que distintas autoridades señalaron el éxito de la consulta, con la participación de un 75% de las comunidades indígenas, se han documentado irregularidades de varios tipos. 

El bajo porcentaje de participación real (2.86% del padrón electoral), la supuesta presión a comisarios municipales para votar a favor, la falta de información sobre los proyectos turísticos que acompañan al tren y la manipulación de la participación indígena para solicitar beneficios sociales a cambio de la aprobación que son un derecho son algunas de las irregularidades del proceso. Posterior a la consulta, un defensor del territorio reportó amenazas de muerte relacionadas con su labor de defensa de derechos humanos en la península.

Crédito de la foto: Animal Político