En noviembre de 2015, pescadores y agricultores indios presentaron una demanda en contra de la Corporación Financiera Internacional (IFC) ante una corte federal estadounidense por daños ambientales de la planta de energía que la IFC financió. En marzo de 2016, un juez dictaminó que la IFC no podría ser demandada en este caso.

En agosto de 2016, las comunidades afectadas y los agricultores presentaron una apelación argumentando que, en virtud de decisiones recientes de la Corte Suprema de los EE. UU., La CFI no tiene derecho a la inmunidad absoluta y debe ser sujeta a juicio por daños causados por la planta de energía. El 23 de junio de 207, un tribunal de apelaciones de los Estados Unidos dictaminó que la CFI tiene derecho a la "inmunidad absoluta" y que no puede ser demandada por las comunidades perjudicadas por los proyectos de la CFI. En julio de 2017, las comunidades afectadas pidieron a un tribunal que revisara la doctrina de la "inmunidad absoluta". El 26 de septiembre de 2017, un Tribunal de Apelaciones de los Estados Unidos dictaminó que no reconsideraría la norma de inmunidad. Los demandantes apelarán a la Corte Suprema de los EE. UU.

En enero de 2018, comunidades de pescadores y agricultores presentaron su caso ante la Corte Suprema de los Estados Unidos. El 21 de mayo de 2018, el Tribunal Supremo de Estados Unidos acordó considerar el caso presentado contra la Corporación Financiera Internacional por las comunidades de campesinos y pescadores indios. El 31 de julio de 2018 el Gobierno de EE.UU. presentó un informe a la Suprema Corte del país contra la inmunidad absoluta de las organizaciones internacionales ante las demandas, en apoyo a la reclamación de las comunidades indias. El 31 de octubre de 2018, el Tribunal Supremo examinó la apelación para retirar la inmunidad a la Corporación Financiera Internacional, según el derecho estadounidense.Varios jueces afirmaron que, probablemente, el tribunal respaldará a la Corporación.

El 27 de febrero de 2019, la Corte Suprema de los Estados Unidos dictaminó que la Corporación Financiera Internacional, no es inmune a los procedimientos en los tribunales de los Estados Unidos, y, de hecho, puede ser demandada cuando está actuando como un actor privado en el mercado. El caso volverá a los tribunales.