“Así responde el ejército a quienes lo cuestionan”
1 de mayo de 2020
…Injustificable: tras pedir información pública al Ejército, fuimos blanco de 'inteligencia'. Esta es una editorial que representa la opinión de todos y todas las periodistas de Rutas del Conflicto… La investigación “Las Carpetas Secretas”, publicada en la edición n.º 1983 del 3 al 10 de mayo de 2020 de la Revista Semana, muestra el seguimiento informático del Ejército a más de 100 periodistas, líderes sociales y figuras políticas, además de la construcción de grupos de relación por la interacción en estas redes. De todas las carpetas descubiertas en la investigación, la única que rastreaba colectivamente a todo un medio de comunicación, fue la nuestra… La investigación muestra un evidente caso de violación a nuestra intimidad y un grave atentado contra nuestro trabajo como periodistas, contra nuestro derecho a la libertad de expresión. Primero como medio de comunicación que termina perfilado por parte de inteligencia militar, como si se tratara de alguna organización que actuara por fuera de la ley, por el simple hecho de ejercer un periodismo crítico con las instituciones. Y segundo con el derecho de cada uno de los y las colegas que hacen parte de este proyecto de poder expresar sus opiniones personales en redes sociales, sin que por eso sean ‘fichados’ y ligarlos sin ningún tipo de sustento con círculos de relación que solo existen en la paranoia de algunos militares…. En nuestro caso, hay claros indicios que muestran que estos ‘perfilamientos’ digitales ocurrieron a partir de una investigación que desarrollamos durante el primer semestre de 2019 junto a la Liga Contra el Silencio, una iniciativa creada por la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP), precisamente para enfrentar la censura. Creemos que nos ‘perfilaron’ por preguntar y exigirle información pública al Ejército, en otras palabras, por hacer nuestro trabajo…. La investigación comenzó seis meses antes, en febrero de 2019. En ese momento, haciendo uso del derecho que tenemos como ciudadanos a acceder a información pública, le solicitamos a las entidades respectivas los convenios que habían suscrito con las mencionadas empresas. El Ejército respondió que era información reservada, ante lo cual, acudimos acompañados de la FLIP a una tutela, ya que insistimos en que era información pública: hacíamos simplemente nuestro trabajo, amparado por los derechos que nos da la ley…