Si una empresa se apropiara de tierras que le pertenecen a usted sin indemnización alguna, contaminara sus fuentes de agua, o ingresara milicias privadas para vigilar un pozo petrolero, y estos grupos violaran y abusaran de las mujeres de una comunidad local, usted debería tener el derecho a asegurarse de que tal situación cese y de que se le restituyan sus medios de subsistencia. Sus derechos humanos deben ser respetados sin importar si usted es adinerado o pobre, e independientemente de su ubicación geográfica. Esto es lo que se llama ‘Acceso a Recursos’, y constituye uno de los tres pilares clave de los Principios Rectores de las Naciones Unidas sobre las Empresas y los Derechos Humanos...Con base en nuestra visión de conjunto y datos únicos, evidenciamos tres realidades a las que se enfrentan las víctimas que buscan justicia por los abusos cometidos por empresas en contra de ellas: 1) Los escenarios a donde tradicionalmente se pueden instaurar demandas extraterritoriales están cerrando sus puertas y los gobiernos de países donde las empresas multinacionales tienen sus casas matrices no proporcionan acceso suficiente a recursos judiciales para los abusos cometidos por sus empresas en el exterior. 2) El hostigamiento legal contra defensores y defensoras de derechos humanos va en aumento, en especial contra aquellos que trabajan para hacer que las empresas rindan cuentas por los abusos a los derechos humanos que cometan. 3) Existen nuevos, aunque limitados espacios en donde se pueden instaurar demandas contra violaciones a los derechos humanos cometidas por empresas, que vienen surgiendo a medida que las víctimas buscan nuevos caminos para acceder a recursos judiciales...